En
esta vida a diario nos hallamos con muchas personas que presume de aquello que
no practica o no tiene.
Y
viven falseando y también confunde a los demás y lo peor que se creen que lo
hacen bien.
Es
muy difícil ver nuestros errores y en muchas ocasiones presumimos de
seres admirables, cuantas mascaras esconde nuestro rostro.
Autor: José Ramón
Qué interesante esto, José Ramón, me recuerda el refrán, "dime de qué presumes y te diré de qué careces". Al igual que las personas que saltan terriblemente ofendidas ante alguna acusación leve, eso las muestra culpables también.
ResponderEliminarFijate en los primeros renglones, hay errores de tipeo en los plurales, es una tontería pero está tan bueno que por qué no dejarlo perfecto no? Un abrazo y disculpá mi atrevimiento.
Reconocer errores no ayuda a mejorar
ResponderEliminarMuy bien expresado el post
Un abrazo
Reconocer sus propios errores no es para todos.
ResponderEliminarmuy buen texto,saludos
Siendo así tiene un mérito enorme ser capaz de escribir textos tan sentidos y con tanto éxito de público. Recibe mi admiración sincera. Un saludo.
ResponderEliminarAún con todos nuestros errores, todos tenemos nuestro punto de bondad en el corazón.
ResponderEliminarSaludos.
La coherencia es una virtud que no se da tan facilmente.
ResponderEliminarMuy buena la reflexión.
Besos de colores.
Buena reflexión, Seres en proceso de aprendizaje y de los errores aprendemos.
ResponderEliminarBuen domigno Jose Ramón
Es importante disfrutar de los pequeños momentos y de nuestros errores para aprender un poco más.
ResponderEliminarUn beso.
En este mundo colmado de errores de todo tipo lo más difícil es reconocer los propios.
ResponderEliminarSólo si los reconocemos somos capaces de no volver a cometerlos.
Nadie es perfecto y todos podemos aprender de ellos.
Buen día.
Un abrazo.
Hola José Ramón...es muy interesante tu planteamiento, y eso es así. Nos cuesta mucho reconocer nuestros errores porque la soberbia nos ciega. Gracias por comparir este pensamiento para reflexionar.
ResponderEliminarRecibe un fuerte abrazo.
El conocerse lleva sus tiempos.
ResponderEliminarOjala todos tuvieran esa capacidad de aprender a ver cuando la lamparita se enciende.
Cariños
Mirarnos primero a nosotros mismos, esa seria la clave, pero es mucho mas dificil...
ResponderEliminarUn abrazo.
El mundo es nuestro espejo, si sabemos conducir esa relación, obramos es Santidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cierto, solo vemos la paja en el ojo ajeno, es una gran soberbia en el ser humano.
ResponderEliminarSaludos.